Gripe porcina o A H1N1: nuevos estudios sobre sus orígenes (revista Science y OMS)…


Un estudio científico explora el origen del virus de la gripe AH1N1

Según un estudio reciente publicado en Internet por la revista Science, la relación del nuevo virus H1N1 con sus parientes más cercanos es bastante lejana, y sugiere que sus genes podrían haber estado circulando por las poblaciones porcinas durante algún tiempo sin haber sido detectados. Además, algunos científicos confirman que el virus ha adquirido una nueva categoría, ya que han observado que contiene una combinación de segmentos genéticos sin precedentes.

Neo Mundo | 28/5/2009-00:00 hs. | "Este estudio refuerza la teoría de que los cerdos son una reserva importante de virus de gripe y son capaces de provocar brotes de enfermedades respiratorias graves o incluso una posible pandemia en humanos.

Los resultados del estudio muestran la necesidad de vigilar de forma más sistemática y a escala mundial los virus de la gripe en cerdos", comentó la Dra. Nancy Cox, una de las autoras del estudio y directora de la "División Gripe" de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, Estados Unidos).

El estudio recibió apoyo de la UE a través del proyecto EMPERIE (Plataforma de gestión europea para entidades de enfermedades infecciosas emergentes y resurgentes), financiado mediante el Séptimo Programa Marco (7PM).

Conclusiones,

Los investigadores llegaron a estas conclusiones tras secuenciar los genomas de más de setenta muestras del virus H1N1, la mayoría de las cuales procedían de pacientes de México y Estados Unidos.

"A través de nuestros análisis hemos confirmado que probablemente los cerdos fueran el origen del nuevo virus H1N1", afirmó la Dra. Cox. Además añadió que el nuevo virus es muy diferente de los virus H1N1 que afectan a humanos , lo que indica que "las vacunas estacionales contra la gripe H1 podrían no tener efecto entre las personas infectadas por este nuevo virus".

Historia

Con la ayuda de las muestras, los investigadores pudieron reconstruir la historia del virus. Seis de los ocho segmentos genéticos que se estudiaron procedían de una cepa de gripe porcina conocida que lleva circulando por Norteamérica y Asia desde 1998.

Los dos segmentos restantes provienen de cepas euroasiáticas de virus porcinos que nunca se habían detectado fuera de esta zona hasta ahora. También es la primera vez que se advierte semejante combinación de segmentos genéticos.

Además, las muestras resultaron ser muy parecidas entre ellas, lo que indica que el virus contagió a humanos tan sólo una vez, o que por el contrario, virus muy similares pudieron contagiar a humanos en varias ocasiones.

"Nuestros análisis muestran que todos los segmentos genéticos derivan de virus de la de gripe porcina, pero aún no sabemos si los humanos se contagiaron directamente de los cerdos o de algún huésped que actuó como intermediario. Tampoco sabemos con certeza el huésped exacto en el que los virus han estado circulando hasta adquirir sus características actuales", concluyó Cox.

Seguidamente añadió que los investigadores veterinarios de todo el mundo están ahora revisando sus congeladores para comprobar si tienen muestras de cerdos u otros animales que puedan aclarar el surgimiento de este nuevo virus.

Según la Dra. Cox, el hecho de que los virus sean parecidos "facilita muchísimo nuestra tarea de encontrar un virus de referencia para una posible vacuna".

/www.tucumanoticias.com.ar


Gripe AH1N1 tiene origen aviar y luego pasó a los cerdos, revela OMS

Cepa de la gripe AH1N1

Ginebra (Peru.com).- La secuenciación del genoma del virus de la gripe influenza AH1N1, desvela que el origen de todos los segmentos genéticos que lo forman se encuentra en las aves y que luego pasó a los cerdos. La mayoría de estos genes virales llevan circulando en Norteamérica y Asia desde 1998.

El estudio, dirigido por el Centro de Colaboración para la Gripe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en los Centros de Control y Prevención de las Enfermedades en Atlanta (Estados Unidos), se publicará en la revista Science.

La secuenciación de los genomas de más de 50 muestras del virus de la gripe A (H1N1) indica que este virus está remotamente relacionado con los virus con los que guarda un mayor parecido, lo que indica que sus genes han estado circulando sin ser detectados durante un largo periodo de tiempo.

Los descubrimientos sugieren que en el futuro las poblaciones porcinas deberán ser vigiladas más de cerca ante la posibilidad de que aparezcan virus de la gripe, según publica ABC.

Los científicos, dirigidos por Rebecca Garten, secuenciaron en parte o por completo los genomas de los virus (H1N1) de la gripe A de 2009 aislados en México y los Estados Unidos.

Determinaron el origen de los ocho segmentos genéticos del virus y descubrieron que la combinación de estos segmentos genéticos no se había descubierto antes entre los virus de la gripe porcina o humana.

Según los investigadores, todos los segmentos se originaron en aves y después comenzaron a circular en cerdos en varios momentos temporales distintos entre 1918 y 1998.

Seis de los ocho segmentos se originaron de una triple recombinación de virus porcinos que habían estado circulando en Norteamérica y Asia desde 1998. Esta triple recombinación incluye material genético de humanos, aves y virus porcinos como resultado de la tendencia de estos virus a intercambiar piezas de los genomas entre sí.

Los otros dos segmentos genéticos están derivados de virus porcinos eurasiáticos.

Las secuencias de los segmentos genéticos no revelaron las firmas de alta transmisibilidad o virulencia que se habían descubierto en otros virus de gripe A, lo que sugiere que otras secuencias aún desconocidas son las responsables de la capacidad del nuevo virus para replicarse y extenderse entre los humanos.

Los investigadores también examinaron de cerca la proteína hemaglutinina del virus A (H1N1), que es la responsable de la capacidad del virus para unirse e infectar la célula del organismo invadido.

Los experimentos en tubos de laboratorio en los que se examinaron cómo los anticuerpos de hurones reaccionaban ante esta proteína sugieren que la nueva variedad tiene propiedades antigénicas que son similares a las de otros virus A porcinos (H1N1), pero distintas a las de la gripe humana estacional.

Según los investigadores, es necesario seguir examinando estos cambios en la proteína hemaglutinina en el nuevo virus, dado que es un aspecto que podría afectar a la selección de posibles vacunas.

Método científico. Un ejemplo médico


Como ilustración de algunos aspectos importantes de la investigación científica, parémonos a considerar los trabajos de Semmelweis en relación con la fiebre puerperal. Ignaz Semmelweis, un medico de origen húngaro, realizó esos trabajos entre 1844 y 1848 en el Hospital General de Viena. Como miembro del equipo medico de la Primera División de Maternidad del Hospital, Semmelweis se sentía angustiado al ver que una gran proporción de las mujeres que habían dado a luz en esa división contraía una seria y con frecuencia fatal enfermedad conocida como fiebre puerperal o fiebre de postparto. En 1844, hasta 260, de un total de 3.157 madres de la División Primera —un 8,2 por 100— murieron de esa enfermedad; en 1845, el indice de muertes era del 6,8 por 100, y en 1846 del 11,4. Esas cifras eran sumamente alarmantes, porque en la adyacente Segunda División de Maternidad del mismo Hospital, en la que se hallaban instaladas casi tantas mujeres como en la Primera, el porcentaje de muertes por fiebre puerperal era mucho más bajo: 2,3, 2,0 y 2,7 en los mismos atlas. En un libro que escribió más tarde sobre las causas y la prevención de la fiebre puerperal, Semmelweis relata sus esfuerzos por resolver este terrible rompecabezas.

Semmelweis empezó por examinar varias explicaciones del fenómeno corrientes en la epoca; rechaza algunas que se mostraban incompatibles con hechos bien establecidos; a otras las sometía a constrastación.

Una opinión ampliamente aceptada atribuía las olas de fiebre puerperal a «influencias epidémicas», que se describían vagamente como «cambios atmosférico-cósmico telúricos», que se extendian por distritos enteros y producían la fiebre puerperal en mujeres que se hallaban de postparto. Pero, como —argüía Semmelweis-- podían esas influencias haber infestado durante años la División Primera y. haber respetado la Segunda? Y, como podía hacerse compatible esta concepción con el hecho de que mientras la fiebre asolaba el hospital, apenas se producía caso alguno la ciudad de Viena o sus alrededores? Una epidemia de verdad, como el cólera, no seria tan selectiva. Finalmente, Semmelweis señala que algunas de las mujeres internadas en la División Primera que vivían lejos del hospital se habían visto sorprendidas por los dolores de parto cuando iban de camino, y habían dado a luz en la calle; sin embargo, a pesar de estas condiciones adversas, el porcentaje de muertes por fiebre puerperal entre estos casos de «parto callejero» era mas bajo que el de la División Primera.

Según otra opinión, una causa de mortandad en la División Primera era el hacinamiento. Pero Semmelweis señala que de hecho el hacinamiento era mayor en la División Segunda, en parte como consecuencia de los esfuerzos desesperados de las pacientes para evitar que las ingresaran en la tristemente celebre División Primera.

Semmelweis descartó asimismo dos conjeturas similares haciendo notar que no había diferencias entre las dos divisiones en lo que se refería a la dieta y al cuidado general de las pacientes.

.En 1846, una comisión designada para investigar el asunto atribuyó la frecuencia de la enfermedad en la División Primera a las lesiones producidas por los reconocimientos poco cuidadosos a que sometían a las pacientes los estudiantes de medicina, todos los cuales realizaban sus practicas de obstetricia en esta división. Semmelweis señala, para refutar esta opinión, que (a) las lesiones producidas naturalmente en el proceso del parto son mucho mayores que las que pudiera producir un examen poco cuidadoso; (b) Las comadronas que recibían enseñanzas en la División Segunda reconocían a sus pacientes de modo muy análogo, sin por ello producir los mismos efectos; (c) cuando, respondiendo al informe de la comisión, se redujo a la mitad el número de estudiantes y se restringi6 al mínimo el reconocimiento de las mujeres por parte de estos, la mortalidad, después de un breve descenso, alcanzó sus cotas mas altas.

Se acudió a varias explicaciones psicológicas. Una de ellas hacia notar que la División Primera estaba organizada de tal modo que un sacerdote que portaba los últimos auxilios a una moribunda tenía que pasar por cinco salas antes de llegar a la enfermería: se sostenía que la aparición del sacerdote, precedido por un acólito que hada sonar una campanilla, producía un efecto terrorífico y debilitante en las pacientes de las salas y las hacía así mas propicias a contraer la fiebre puerperal. En la División Segunda no se daba este factor adverso, porque el sacerdote tenia acceso directo a la enfermería. Semmelweis decidió someter a prueba esta suposición. Convenci6 al sacerdote de que debía dar un rodeo y suprimir el toque de campanilla para conseguir que llegara a la habitación de la enferma en silencio y sin ser observado. Pero la mortalidad no decreció en la División Primera.

A Semmelweis se le ocurri6 una nueva idea: las mujeres, en la División Primera, yacían de espaldas; en la Segunda, de lado. Aunque esta circunstancia le parecía irrelevante, decidió, aferrándose a un clavo ardiendo, probar a ver si la diferencia de posición resultaba significativa. Hizo, pues, que las mujeres internadas en la División Primera se acostaran de lado, pero, una vez más, la mortalidad continuó.

Finalmente, en 1847, la casualidad dio a Semmelweis la clave para la solución del problema. Un colega suyo, Kolletschka, recibió una herida penetrante en un dedo, producida por el escalpelo de un estudiante con el que estaba realizando una autopsia, y murió después de una agonía durante la cual mostró los mismos síntomas que Semmelweis había observado en las victimas de la fiebre puerperal. Aunque por esa época no se había descubierto todavía el papel de los microorganismos en ese tipo de infecciones, Semmelweis comprendió que la “materia cadavérica” que e1 escalpelo del estudiante había introducido en la corriente sanguínea de Kolletschka había sido causa de la fatal .enfermedad de su colega, y las semejanzas entre el curso de la dolencia de Kolletschka y el de las mujeres de su clínica llevó a Semmelweis a la conclusión de que sus pacientes hablan muerto por un envenenamiento de la sangre del mismo tipo, é1, sus colegas y los estudiantes de medicina habín sido los portadores de la materia infecciosa, porque .é1 y su equipo solían llegar a las salas inmediatamente después de realizar disecciones en la Sala de autopsias, y reconocían a las parturientas después de haberse lavado las manos de un modo superficial, de modo que estas conservaban a menudo un característico olor a suciedad.

Una vez más, Semmelweis puso a prueba esta posibilidad. Argumentaba él que si la suposición fuera correcta, entonces se podría prevenir la fiebre puerperal destruyendo el material infeccioso adherido a las manos. Dictó, por tanto una orden por la que exigía a todos los estudiantes de medicina que se lavarán las manos con una solución de cal clorada antes de reconocer a ninguna enferma. La mortalidad puerperal comenzó a bajar, y en el año 1848 descendió hasta el 1,27 por 100 en la División Primera, frente al 1,33 de la Segunda.

En apoyo de su idea, o, como también diremos, de su hipótesis, Semmelweis hace notar además el hecho de que en la mortalidad en la División Segunda fuera mucho más baja: en esa las pacientes estaban atendidas por comadronas, en cuya preparación no estaban incluidas las prácticas de anatomía mediante disección de cadáveres.

La hipótesis explicaba también el hecho de que la mortalidad fuera menor entre los casos de “parto callejero”: a las mujeres que llegaban con el niño en brazos, casi nunca se les sometía a reconocimiento tras su ingreso, lo que aumentaba sus posibilidades de escapar de la infección.

Asimismo, la hipótesis daba cuenta del hecho de que todos los recién nacidos que habían contraído la fiebre puerperal fueran hijos de madres que habían contraído la enfermedad durante el parto; porque en ese caso la infección se le podía transmitir al niño antes de su nacimiento, a través de la corriente sanguínea común a madre e hijo, lo cual, en cambio resultaba imposible cuando la madre estaba sana.

Posteriores experiencias clínicas llevaron a Semmelweis a ampliar su hipótesis. En una ocasión, por ejemplo, él y sus colaboradores, después de haberse desinfectado cuidadosamente las manos, examinaron primero a una parturienta aquejado de cáncer cervical ulcerado; procedieron luego a examinar a otras doce mujeres en la misma sala, después del lavado rutinario, sin desinfectarse de nuevo. Once de las doce pacientes murieron de fiebre puerperal. Semmelweis llegó a la conclusión de que la fiebre puerperal podía ser producida no solo por materia cadavérica, sino también por “materia pútrida procedente de organismos vivos”.

CUESTIONES

¿Qué problema intenta resolver Semmelweis?

Al analizar las circunstancias del problema, Semmelweis se fija especialmente en aquellas que difieren en ambas divisiones del hospital ¿por qué actúa de esta forma?

Relacionas las hipótesis que se plantea el científico para resolver el problema.

¿Como puso a prueba cada una de las hipótesis?

¿Cuales de las hipótesis fueron verificadas y cuales fueron falsadas?

Método científico. Hipótesis y experimentos

Una de las características representativas del método científico es que toda idea ha de ser puesta a prueba de forma empírica. Ante cualquier problema se plantean hipótesis que deben verificarse o falsarse mediante experimentos.

Veamos todo esto con un ejemplo sencillo. Cuando un cuerpo suspendido de una cuerda pierde su posición comienza a oscilar en un movimiento periódico. Este problema es conocido entre los físicos como el péndulo simple. La observación del péndulo y la curiosidad nos pueden llevar a preguntarnos ¿por que oscila el péndulo a ese ritmo y no mas deprisa o mas despacio? o, planteando la pregunta de forma mas precisa ¿de que factores depende el tiempo que tarda el péndulo en dar una oscilación?

Plantea hipótesis para intentar responder la pregunta y despues usa la animación para realizar los experimentos (de forma simulada).





Anota los resultados de las medidas en tu cuaderno así como las conclusiones obtenidas ¿coinciden los resultados con lo que esperabas?

Diferencias entre gripe común y gripe A


¿Gripe común o gripe A? ¿Que diferencias existen entre ambas? Para saberlo sin tener que pasar por ella aquí teneís un cuadro resumen tomado del diario EL MUNDO. Como veis muchos de los síntomas son los mismos aunque padeciéndose en diferente intensidad y con distinta duración.

El Minsiterio del Sanidad de España ha publica una web con información sobre esta nueva variedad de la gripe y dando respuesta a las preguntas mas frecuentes sobre ella.